El Peugeot 505 es un vehículo del segmento D, fabricado por la casa francesa entre 1979 y 1992, sucesor natural del 504, y que fue además ensamblado en otras locaciones como ser España, Mexico, Chile, Australia y también en Argentina por la firma Sevel.
En nuestro país, se produjo en ambas fases, la segunda a partir de 1986 (conocida como Gamma) que incorporaba notables cambios en el interior, con un tablero mucho más sofisticado y de gran calidad, junto con el rediseño de faros traseros y una pasada en limpio del frontal.
Con mecánicas de nafta y diesel, la única que se vendió aquí dotada de turbo fue ésta última, mientras que la naftera fue el primer lanzamiento nacional de un motor a inyección.
El modelo que hoy nos ocupa, un 505 Turbo Injection si bien como comenté no se produjo aquí, tiene rasgos exteriores muy similares a los 505 Injection autóctonos, un vehículo muy deseado en su época por su gran confort y completísimo equipamiento, pilares del prestigio que Peugeot supo ganarse con sus productos desde sus comienzos en el país.
La Miniatura
La marca Otto Mobile surgió hace poco tiempo en Francia y se dedicó a modelar autos de calle franceses en 1/18, centrándose principalmente en aquellos más admirados o deseados de marcas generalistas como Renault, Peugeot, Citroen, etc, por eso encontraremos solo las versiones tope de gama de cada una, es decir Turbos, GTi´s etc.
Es mi primera incursión en la resina en 1/18.
Desde ya les digo que hay que ser open mind, y vencer ciertos prejuicios que ya escuché mas de una vez cuando sale el tema con esta marca.
El primero, es referido a su material, algo así como que "si no es de metal no vale".
Nada más alejado de la realidad.
Otro de los prejuicios es en relación a las aperturas.
Es cierto que son interesantes, y yo las destaco (y agradezco) cuando las tiene.
Pero por otro lado se logran líneas más fluidas y mejor terminación cuando no las hay.
Y con una mano en el corazón, cuántas veces las abrimos o bien cuántos de nuestros modelos lucen en la vitrina, no digo con todas, pero con al menos una de ellas abierta?
A todo esto, el 505 me ha sorprendido gratamente.
Lo que acabo de apuntar es claramente visible en esta foto.
Entre la pintura, aplicada con maestría, hasta el molde y sus líneas dan la apariencia de estar ante el vehículo real. No me canso de mirarlo.
Las ruedas están excelentemente reproducidas, los neumáticos son de goma con el dibujo correcto, aunque fiel a la tendencia general carecen de marca en sus flancos.
La trompa está muy bien lograda, la parrilla es de fotograbado al igual que el león del emblema, completando con ópticas y faros de posición de gran calidad.
La trasera es su ángulo más vistoso, con la zaga luciendo ese famoso alerón sobre la tapa del baúl, completando la imágen los faros que corresponden a la Fase 1, a mi gusto mucho más linda que la siguiente, pues respeta el diseño original de Pininfarina.
Las ventanillas son de un material más fino y transparente que el acrílico que vemos normalmente en cualquier diecast, lo que le otorga una cuota mayor de realismo visual.
El interior, pese a que no tiene apertura de puertas, es otro de los fuertes del modelo pues está replicado con esmero hasta el más mínimo detalle.
Solo hay que buscar el ángulo en que la luz penetre de forma tal que se pueda apreciar correctamente.
Esta última vista, termina de dar una idea general del modelo, principalmente del brillo y tersura de su pintura, a punto tal que cuesta encontrarle defecto alguno.
Con el tiempo, y luego de este debut incorporé algunos modelos más de esta marca que ya iré mostrando.
Más allá del debate acerca de su material, lo cierto es que no hay otra posibilidad de hacerse con un 505 a 1/18.
Por mi parte entonces, bienvenido sea.