viernes, 28 de febrero de 2014

Volkswagen T2a Pritsche (1967) - Schuco 1/18


Hacer una pequeña reseña de la historia de este emblemático VW es tarea compleja, aunque apasionante a la vez. Pero como nos vamos a centrar en un período y modelo en especial, trateremos de hacerlo lo más conciso posible.

La segunda generación del VW Type 2 (T2 en correlación numérica al T1 conocido como beetle, kafer o escarabajo) se presenta promediando el año 1967.
Se construyó en Alemania hasta 1979, y en otros países como Mexico, Brasil y Argentina, siendo los modelos hasta 1971 conocidos como T2a y los posteriores como T2b
Esta segunda generación del Type 2 perdió su distintivo parabrisas dividido, y era ligeramente mas grande y considerablemente más pesado que su predecesor.
Los T2a se diferencian externamente por las luces de posición situadas abajo.


El paragolpes delantero es otro elemento distintivo, pues su forma curva se achata en los extremos para pasar debajo de las puertas y hacer las veces de escalon para subir, ángulo de apuertura de puertas de casi 90°, y tapa de motor más chica.
Mecánicamente, incorporaba un motor de 1.6 litros y 47hp, y un novedoso tren trasero con semiejes y juntas universales, en reemplazo de las cajas de transferencia en cada rueda.


Para 1972, con el T2b se sumaron discos de freno delanteros, motor más grande, luces de posicón incorporadas a ambos lados de la rejilla de ventilación delantera, paragolpes más rectilíneo, y llantas con agujeros de ventilación y tazas más chatas.



Esos fueron en esencia los principales cambios, por supuesto hay infinitas variaciones y sobre todo motorizaciones, que escapan al alcance de este post.


Vamos al modelo:

VW T2a Pritsche Pick up – SCHUCO 1/18

Lanzado como novedad hace unos años, Schuco es el único en esta escala en reproducir la Pick Up, habiendo otras marcas que debido a su popularidad sacaron la Bus o Kombi, como Solido y Yat Ming, aunque éstos solo hicieron la versión T2 primitiva.
Asi que este ejemplar, es novedoso en ambos sentidos, carrocería y versión.


La delicadeza de molde, pintura y acabados nos demuestra una vez más que Schuco de haber seguido en esta escala hubiese sido un duro rival de AUTOart.


Aquí, como es habitual, una comparativa de escala con una clásica Matchbox # 34c de 1967, vieja compañera de la infancia.

Hecha entonces la presentación, les dejo una recorrida fotográfica como para que la puedan apreciar desde todos sus ángulos.





Se destaca ese promiente gancho de remolque, si lo pusieron es porque así debían ser, a mi modo de ver es un accesorio que no aporta demasiado a la miniatura.

Las rejillas de ventilación laterales, son perforadas y su efecto resaltado por la pintura negro mate interior, muy prolija.

Como se aprecia, las bisagras y ganchos de sujeción de las portezuelas son metálicos y operables.







La tapa del motor, es operable y se mantiene abierta mediante su sostén metálico

El conjunto luce bien, aunque quizá un poco de tonalidades o texturas como para destacar ciertas partes hubiera dado un mejor resultado, habida cuenta de que el motor de por sí es bastante sencillo, en eso AUTOart está un paso adelante creo.





En cuanto al interior, compensa con creces lo que le reclamamos al motor:



Nos queda ver los bajos, muy completos en su presentación pero, otra vez, quizá un poco de color aquí y allá lo hubiese resaltado aún más, aumentando la percepción de calidad.
Sobriedad alemana, que le dicen. 




Por último (a mi gusto) la mejor foto del reportaje, en la cual luce tan natural que parece 1:1



Agradecemos la participación de la "modelo extra" que posó junto a la T2 en algunas tomas.
Una Honda CBR600RR de Maisto.

Me pasa a mí o esta plataforma es insufrible?

Llegúe a esta instancia, de escribir y hacer pública con mis colegas bloggeros esta situación, a ver si a alguién también le sucede o soy el único.

Confieso que ayer estaba entusiasmado, luego de cenar me senté frente a la pc y me puse a armar una nueva entrada, comencé a las 22:30 y eran las 00:30 y seguía luchando con boludeces de edición y caprichos de esta maldita plataforma, cuestión que me cansé y apagué todo.


Paso a detallar, primero subir las fotos es un parto, en mi caso tengo todas mis fotos en photobucket, es igual a imageshack o cualquier otro hosting de fotos, pero no encuentro una forma práctica de hacerlo, en los foros por ejemplo con pegar el link [img] está todo perfecto, y la pantalla de edición trabaja como cualquier procesador de textos, y uno acomoda a piaccere como más le gusta.


La solución que encontré, luego de horas y horas de infructuosas pruebas, fue irme a un foro, armar el texto y toda la pelota ahí, luego hacer la vista preliminar en dicho foro, y finalmente copiar y pegar sobre dicha vista y llevarlo al blog...

Un laburo innecesario, inútil, pero no encuentro forma de hacerlo práctico aquí, desde la página de armado de la entrada y sin tantas vueltas.

En este nefasto sistema de blog (se nota que lo odio?) todo parece hecho para joder al entusiasta, me extraña porque Google en todo lo que ha hecho siempre brindó soluciones prácticas, parece no ser este el caso.


Veamos ejemplos:


-Uno mueve un texto y se cambia cualquier otra cosa menos lo deseado (por qué carajo?),

-En las opciones de foto por ejemplo selecciona opción "alinear a la izquierda" y se me va dicha foto al principio del texto, arriba de todo (????),
-Cuando se me juntan dos fotos seguidas (pegadas) no hay forma de insertar un texto entre medio, sin las complicaciones indicadas en los puntos anteriores.
-Si doy un "enter" entre líneas, se me va el cursor al final de tooooodo el texto.
-Si por una de esas cosas se me pone un texto al costado de una foto, no hay forma de hacerlo volver a su lugar anterior, o al que a uno se le ocurra.
-De nada sirve tocar los botones de alineación, por si a alguno se le ocurre que no los miro ni los tengo presentes.

Y así puedo estar escribiendo otras dos horas.

No puede ser que todo hasta ahora lo haya podido hacer "de casualidad", sí pura casualidad por prueba y error, es decir no encuentro relación entre una acción y su resultado porque cada vez reacciona diferente, no puedo encontrarle la lógica, y eso que estoy todo el dia trabajando con computadoras, pero esto es muy frustrante, ya me estoy cansando.

Bueno, hice mi catarsis, quisiera escuchar sus opiniones, sobre todo de los más experimentados, a ver si soy el único al que le pasan estas cosas.


Saludos!



lunes, 17 de febrero de 2014

Mercedes Benz L322 (1961) - Schuco 1/18



En marzo de 1959 Mercedes presenta su primera serie de camiones de morro corto.
El cambio de diseño en las cabinas de camiones obedecía a la nueva reglamentación dictada por el Ministerio de Transportes y Ferrocarriles de la República Federal, una ordenación muy rigurosa en lo que a pesos y dimensiones se refería y en el que se hacía un llamamiento al diseño práctico y bien aprovechado, cosa que parece que la generación anterior de camiones (los convencionales) no cumplía.

El L322 fue el escalón básico de la nueva gama de camione
s, de medio peso y con capacidad para 10,5 toneladas, por tanto era un camión de transporte de cortas distancias. En el capítulo mecánico, el L322 iba asociado a un motor OM 321 de 5,1 litros que ofrecía una potencia de 110 cv. 

Está está considerado el mejor camión de su segmento en su época y ello se tradujo en el número de unidades vendidas.
Uno de los factores causantes de su gran aceptación entre los transportistas fue la adopción de una nueva caja de cambios sincronizada de cinco velocidades. Sus condiciones de carga también lo dejaban en muy buen lugar sobre sus rivales, ya que su tara de 3.700 kilogramos más los 6.750 de carga útil le conferían un factor de carga útil de 1:1,8 , el mejor coeficiente de la época.

En el año 1963, Mercedes Benz adopta una nueva nomenclatura para los camiones, dejando de lado la críptica denominación anterior, para basarse en otra más sencilla, utilizando números de cuatro cifras (que aún hoy se utiliza) en las cuales las dos primeras indican el tonelaje bruto total, y las dos últimas la potencia del motor, en decenas de HP.
Por lo tanto, el modelo que nos ocupa, y luego de una potenciación de su motor en aquel año hasta los 130HP, pasaría a denominarse 1113.


En nuestro país, se inicia la fabricación en el año 1965, con los modelos 911 y 1112, primero en camiones, y años más tarde también en chasis para colectivos (autobuses).
En 1967, se inicia la fabricación en serie del camión modelo L1114 con motor de inyección directa, potencia 140 HP, equipado con motor OM 352.

Estos camiones fueron y son muy populares, pues se produjeron por más de 2 décadas, razón por la cual podemos verlos en cualquier camino de nuestro país.


La miniatura

El modelo que nos ocupa hoy es de la marca Schuco, en escala 1:18

Al igual que el Chevrolet 1946 que les mostrara tiempo atrás, es una pieza de gran tamaño y considerable peso, pero más complejo constructivamente que aquél.
Todo esto atenta a la hora de manipularlo, sus casi 3 kilogramos no perdonan errores y es facil estropear alguna fina pieza de su chasis al tomarlo desde abajo. 
Contribuye a eso su factura íntegramente en diecast, es decir cabina, chasis, y caja de carga todo en metal, asi como ambos ejes y bajos.
El plástico solo está presente en el interior, parte del motor, llantas y detallados y acabados generales.

El hecho de poseer este modelo me da una gran satisfacción, recuerdo cuando chico cuánto deseé tener aquella réplica de Buby del 1112 en 1:43 que para entonces para mí era “lo más”, con su dirección funcional, puertas operables y muy detallado, lo logré tener ya adulto y con unos cuantos años de iniciado en el coleccionismo, 
sin siquiera imaginarme que algún dia la escala 1:18 recompensaría con creces tanta espera.

Veámoslo:



Como es habitual, para apreciar su escala, lo comparamos con algo más “tangible”
En este caso, con un Matchbox RW #1, Mercedes Truck



Apreciar un modelo a escala de este tenor requiere una gran cantidad de fotos pues cada rincón esconde hasta los detalles menos esperados.





Este ángulo es de los más vistosos, llanta delantera, el guardabarros con la característica luz de giro, y uno de los clásicos demarcadores de gálibo, en cierto modo heredados de antiguos vehículos con cabinas más estrechas que sus cajas de carga.







Ni un detalle dejado de lado, parrilla microperforada, estrella y contornos en metal cromado, emblema Mercedes en relieve, rejillas de capo auténticas, perno de remolque extraíble, y posapiés en paragolpes con superficie texturada.



La pintura, destaca por su calidad y brillo.





Abrimos la puerta, cuyo cierre es con traba funcional, y apreciamos su interior.

Enseguida nos es muy familiar, a pesar de nunca haber manejado uno.
Por qué? Pues es el mismo torpedo y comandos que lucían los colectivos de los 70, quién no recuerda esta imagen?
Notar el detalle a la izquierda del velocímetro, de las llaves puestas en el tambor de arranque (un poco fuera de foco)







El noble propulsor, cuyo sonido también nos es inolvidable

Apreciamos cómo el motor está semi embutido en la cabina, lo que permite lograr ese morro tan corto.









Desde la parte trasera, apreciamos el resto:


Si miramos bien, tiene hasta el cableado de los faros traseros



Para acceder a la caja de carga, tendremos que quitar la soga perimetral, que pasa por unos ojales metálicos, para luego remover la lona que la cubre:



Es una lona pesada, tan gruesa como una tela de jean:



Movemos las trabas metálicas que sujetan el flanco lateral





Y ya nos podemos subir tranquilos, y cargar lo que haga falta.



La estructura visible es de madera auténtica

Toda la jaula es totalmente removible si se quisiera.
Para ello es posible quitar los 3 arcos metálicos que la sostienen, y podríamos dejar el camión totalmente plano.

Finalmente, volvemos a montar todo con cuidado:

Y una vez terminado, luce tal cual estaba antes:



Por último, y sosteniéndolo con una mano y sacando la foto con la otra, pues no me animo a ponerlo “patas para arriba”, nos damos una idea del chasis y su mecánica.







Quizá me haya excedido un poco con la cantidad de fotos, pero como comenté al principio, cada detalle es único y merece ser mostrado.


Esta versión (coloración) ya está fuera de catálogo, pues es del año 2005/2006, la primera de toda la serie.
Posteriormente se editó en verde, rojo, y marrón claro, existiendo además uno carrozado de bomberos con escalera, hermosísimo y más grande aún.

Como complemento hay un acoplado especial para este camión, que si no fuera por el espacio para alojarlo ya estaría haciéndole compañia!!


No hay mucho más que agregar, ni aún con el más estricto rigor se le puede pedir más a Schuco por esta magnífica pieza, no escatimaron en lo absoluto, no hay ahorro de costos por ninguna parte, ni siquiera en lo que no se ve, cosa que a veces (y más aun últimamente) sucede en marcas de mayor renombre y prestigio.








viernes, 7 de febrero de 2014

Aston Martin Vantage V8 (2005) - Jaguar XK (2006) - AUTOart 1/18

Aston Martin y Jaguar, dos de las más tradicionales marcas de la industria británica, rivales en sus épocas de esplendor, hoy nos ofrecen sendos vehículos que más que competidores, son primos, paradojas de la globalización que dan lugar a ejercicios interesantes, como el que hoy comparto.

En efecto, el Aston Martin Vantage V8, introducido en 2005, monta en sus entrañas una versión especial del motor Jaguar AJ-V8, de 4.7L con todos los avances tecnológicos y mecánicos que le permiten obtener 420HP, y unas prestaciones asombrosas.

Este propulsor es el único en Aston con lubricación por carter seco, lo que permitió montarlo mucho más abajo, y de esa forma bajar el centro de gravedad del auto.
Una caracteristica innovadora es su carrocería monocasco integramente en aluminio, desarrollada a partir del prototipo Advanced Lightweight Coupe.


Por su parte, el Jaguar objeto de este post, es contemporaneo al Aston, corresponde a la segunda generación de XK, presentada en 2006.


Montando un propulsor V8 de 5.0L, eroga una potencia de 385CV, incorporando una caja automática secuencial de 6 marchas con mando en el volante.


Las miniaturas

Como alguna vez comenté, no incorporo ya modelos actuales para centrarme más en lo clásico, diríamos del 80 y pico para atrás, por una cuestión de pura mutación y cambio constante, algo que desmotiva porque un modelo nuevo dura apenas meses hasta que otro lo reemplaza, y uno termina hartándose y perdiendo la cuenta de las infinitas versiones y restylings, sumado a que el bolsillo tiene un límite como para poder seguirle el tren a cuanta novedad se nos presenta.

Muy a pesar de ello, estos dos modelos me sedujeron por igual, ambos fueron lanzados por AUTOart en forma casi simultánea, y de principio mi corazoncito fue cautivado por el Aston, y efectivamente fue el primero que incorporé, allá por principios de 2008.
Al Jaguar en cambio, nunca dejé de prestarle atención, pasaba habitualmente por el comercio donde había comprado el Aston y lo miraba y miraba una y otra vez, en muchas oportunidades, hasta que al fin meses después me decidí a traérmelo, el mismo ejemplar que compartía estante junto al Aston desde aquel momento, por lo visto el Jaguar estaba destinado a quedarse junto a su primo en la misma casa.
Y más curioso aún es que nadie en el interín se lo haya llevado.

Ambos modelos, son producidos por AUTOart, bajo su línea “Performance”, y llaman la atención enseguida por lo bien realizados que están.

Vayamos a las fotos para ir viéndolos y comentando en detalle.
Así estaban cuando compré el Aston, uno encima del otro, parecen iguales pero no lo son.

Los libramos de sus cárceles de cartón y acetato, y nos disponemos a apreciarlos minuciosamente.

Enseguida notamos que los grises no son iguales, hay una tonalidad distinta en cada uno.

Los diseños, indudablemente son hermosos, la pureza de líneas con algún vestigio de sobriedad británica todavía entre sus rasgos.
Los perfiles, parecidos pero hasta ahí, el Aston es menos lanzado, el Jaguar es más alargado.

Las colas tampoco se asemejan mucho, cada cual ostenta su personalidad.

Finalmente, la vista aérea confirma las presunciones de tamaño que los perfiles insinuaban.
Evidentemente el Jaguar es más largo en todoss sus volúmenes.




Aunque no soy Jaguarista, empecemos por éste.
A esta altura de la cosa, se habrán dado cuenta cuál es la principal atracción de estos bólidos, lo primero que sobresale del conjunto y que a su vez les da ese encanto tan especial.
En efecto, las ruedas y sus frenos.
AUTOart ha hecho sendas obras de arte con estos dos autos, me quito el sombrero y me atrevo a decir que hay muy pero muy pocos autos con trenes rodantes tan fieles y tan realistas como estos.

El aspecto metálico de las llantas por efecto de su fina matriz y su excelente pintura, se suma al auténtico metal de los discos de freno, que junto a sus pinzas conforman un todo maravilloso.

Les gustaron?
Veamos las del Aston Martin, mejores aún a mi juicio.


Sigamos, ahora con los frontales.
Los estilos son muy distintos.
El Jaguar, fiel a su tradición, con su parrilla chiquita y ovalada.

El Aston en cambio, con su característica boca trapezoidal, presente en toda su historia, aunque estilizada acorde a los tiempos que corren.
Embellecen a ambos modelos, las tomas de aire con su rejilla metálica negra por detrás, lo que brinda una mayor sensación de realismo.

Tanto uno como otro, montan unos faros de una delicadeza suprema, sin ningún vestigio de sujeción ni pegamento, un acrílico super claro, y sus unidades ópticas internas perfectamente reproducidas.
Ambos modelos lucen sus marcas de diferente manera.
El Aston, con su escudo en el capó en relieve, y de lectura perfecta.

En cambio el Jaguar, amén del logo central de parrilla, tiene otro sutil detalle en la toma de aire lateral.

Nos vamos hacia atrás.
Bellísimo diseño trasero del Aston, con el paragolpes que aloja la salida doble de escape, y una canalización aerodinámica.
Ya sobre el portón, otro logo en relieve central, y abajo a la derecha, en fino fotograbado se lee “Vantage”


El Jaguar, a mi gusto no es tan agresivo como el Aston, sus líneas son más ovaladas y suaves.
Aunque apenas se lea por el reflejo, en la banda cromada dice “Jaguar”, y el la parte inferior en fotograbado XK de un lado, y 4.2 del otro.
La calidad de reproducción es la misma, no se le puede encontrar defecto alguno.
Alguna que otra imperfección que toma el macro son manchitas o simplemente tierra que aumentada parece un cascote.
Nada de eso sale a simple vista.


Ya dimos la vuelta todo alrededor.
Es hora de abrir una puerta y junar el interior.
Subamos al Aston

Como no podría ser de otra forma, el volante se aloja a la derecha.

Acá otra muestra de calidad y esmero por doquier.
El tablero, con los intrumentos en profundidad, la pedalera, los asientos, la alfombra, en fin todo en su lugar y prolijo
Un ejemplo de lo que comentaba, esa tierrita molesta se amplifica por el sol y el macro.

Al pequeño baul trasero se accede elevando todo el portón, estilo fastback.

Vayamos al Jaguar.
Puerta izquierda, mismo ángulo anterior.

Otro “plus”, el zócalo grabado con la marca.

Y finalmente, el tablero de instrumentos.
Notar el comando de la caja automática.

Vemos también el baul, en este caso sin bandeja superior, y con una capacidad algo mayor al Aston, producto de la zaga más larga en el Jaguar.




Nos queda solamente ver las plantas motrices.
Como sabemos, los motores modernos no se caracterizan por ser particularmente atractivos.
Hoy dia casi todos vienen cubiertos por plásticos, algunas veces decorativos y otras cumplen funciones de insonorización, pero lo cierto es que esos aditamentos ocultan a la vista mecánicas que de otro modo serían asombrosas de ver.

En el caso del Aston, aún así se pueden ver bastantes órganos, y AutoArt se ha esmerado en darle la textura y el color adecuado a cada parte.

Otro detalle magnífico son, además de la pintura interna del capot, las rejillas fotograbadas de toma de aire superior, que al paso de la luz permite apreciarlas.

El Jaguar se distingue por su apertura a contraviento.
Su motor, por lo comentado, parece más sencillo a simple vista.

Sin embargo, mirando con atención, vemos que es un verdadero motor en 3D (no es una mascarilla en relieve al estilo Kyosho actual), pues abajo asoman las cabezas del V8 y por el chasis el motor se une a la transmisión.

Otras instantaneas



Por último, los bajos.
En ambos casos, fielmente reproducidos y coloreados.
Los escapes tienen los correspondientes protectores térmicos que se aprecian en plateado para aislar el calor del piso.
Las suspensiones, y transmisiones, al máximo detalle.
Aston Martin

Jaguar

Ahora sí la final, en hipotética curva.


Conclusión, y más allá del gusto personal las imágenes dan cuenta de que la calidad de factura a la que ha llegado AUTOart nunca deja de sorprender.
Estos dos autos son una clara muestra de ello.

Saludos